Perro de la Calle
Soy manso, soy libre, soy bueno,
Soy un perro de la calle solitario y hambriento
Buscando entre la mugre un poco de conocimiento
Para sobrevivir y no morir en el intento.
No tengo territorio porque vivo bajo el cielo
Y duermo por las noches abrazado al firmamento
Aullando como un lobo en un plenilunio eterno
Ladrando para descargar la rabia y el veneno.
El hocico encendido y el aliento apretado
Me van marcando la presa para acarrear un bocado
Mis garras ya están listas y mis dientes afilados
Para todo aquel que quiera mantenerme acorralado.
No voy atado a nada, solo voy tras mis quereres
Y a los que te dan la mano sin importarle quién eres,
Voy guiado por mi instinto, mi experiencia, mis saberes
Y el coraje que me empuja cuando el miedo me detiene.
Camino por las calles de la gran ciudad
Donde en plena luz del día se ve la oscuridad
A veces me transporto, busco claridad
Poder cerrar los ojos para ir mas allá.
Soy uno de otros tantos que va andando por la vida
esquivándole a las piedras que arrojan desde arriba
de cachorro me enseñaron donde hacer mis porquerías
de ser pelaje ordinario se distingue en la jauría.
Cuando empieza el nuevo día con pureza trae la calma
En el mismo sitio donde se entreveran las almas
Cada alma es una bolsa cargada de sentimientos
Que se juntan como hojas sacudidas por el viento.
Caminando a tranco lento se aprecia mas el camino
Y es mas profunda la huella que se deja contra el piso
En busca de esa caricia que me eleva en un hechizo
Y el calor de la frazada que en el sueño me acobijo.
Camino por las calles de la gran ciudad
Donde en plena luz del día se ve la oscuridad
A veces me transporto y busco claridad
Poder cerrar los ojos para ir mas allá.