La Noche
Por que duermas, hijo mío
El ocaso no arde más
No hay más brillo que el rocío
Más blancura que mi faz
Por que duermas, hijo mío
El camino enmudeció
Nadie gime sino el río
Nada existe sino yo
Se anegó de niebla el llano
Se encogió el suspiro azul
Se ha posado como mano
Sobre el mundo la quietud
Yo no sólo fui meciendo
A mi niño en mi cantar
A la Tierra iba durmiendo
El vaivén del acunar
Se anegó de niebla el llano
Se encogió el suspiro azul
Se ha posado como mano
Sobre el mundo la quietud
Yo no sólo fui meciendo
A mi niño en el cantar
A la Tierra iba durmiendo
Al vaivén del acunar
Yo no sólo fui meciendo, no
A mi niño en el cantar
A la Tierra iba durmiendo
Al vaivén del acunar
A la Tierra iba durmiendo
Al vaivén del acunar
Al vaivén del acunar
Al vaivén del acunar