El Profeta
Se han escrito tantas canciones
sobre páginas vacías
que temo comenzar mi trova
sin guitarra, en silencio.
Durante estos tiempos de guerra,
en esta mañana azuleja,
me da por recordar su figura,
hombre de conflictos y tempestades.
Fue un profeta
que, como todos los profetas,
quiso lo imposible.
Si uno nació hace cien años
es como decir que son
quinientos años
de estar escrito,
pues son miles los edictos,
las campanadas que evocan
diásporas babilónicas
de torres y templos en llamas,
el pabellón del chacal elevándose
sobre el oasis.
”En la lucha desigual
se paga el justo precio,
más que lo alcanzamos
nos mide lo que se sueña.
En lo que uno se empeña,
aquello a lo que aspiramos,
al mundo lo dejamos
mejor de lo que estaba”.
Así vivió el profeta:
pidiendo lo imposible
le dio paso al futuro,
muriéndose poco a poco
ante los ojos del mundo.