Tu Dios de Madera
Dicen que cuando se acerca la hora de la muerte
Uno empieza a creer en Dios
A mí me pasa todo lo contrario: Cada día que pasa
Tengo más pruebas de que Dios no existe
Lo que existe es la religión, y en su nombre se cometen
Las mayores atrocidades del mundo
Intento cambiar de verdad
Intento escapar de no progresar quiero por fin rendirme
Retirarme de toda esta mediocridad
Sumergido en esta desgana
Camino morao por la calle esperando que salga
Que aparezca un golpe de suerte que cambie mi vida
Que cambie mi alma, tan sucia de todo, de todo lo que me rodea
Tan llena de muerte, tan llena de muerte de muchos colegas
Tan llena de muerte de muchos colegas
Y es que te hartas, revientas y al mundo le pegas patadas
Y es que te cansas de todo, y terminas no creyendo en nada
Después de tanta miseria
Como quieres que siga creyendo que existe tu Dios
¡Pues claro que no, no existe tu Dios de madera!
Pero sigo creyendo en tu iglesia
En tu iglesia con propio país, presidente y bandera
Y con joyas, oro y dinero que muchos que mueren de hambre quisieran
Nunca podréis multiplicar esos peces
Pero sí agrandar las riquezas en cuentas corrientes
No lo entiendo, que vendan un poco de arte
Y le den de comer a esa gente
Que vendan un poco de arte y le den de comer a esa gente
Que vendan un poco de arte y le den de comer a esa gente
Y es que te hartas, revientas y al mundo le pegas patadas
Y es que te cansas de todo, y terminas no creyendo en nada
Después de tanta miseria
Como esperas que siga creyendo que existe tu Dios
Pues claro que no, no existe tu Dios de madera
¡Pues claro que no, no existe tu Dios de madera!
¡Pues claro que no, no existe tu Dios de madera!
Mierda de educación que te enseña a vivir como tú no deseas
Mierda de vida que nunca te da elección y te ciega
¡A chuparla la boca!
Que suelta palabras que son mentiras
¡A chuparla la boca cabrones!
¡A chuparla la vida!
Prósperas familias que viven de locura
Mentes más despiertas que buscan en la basura
Blasfeman y se cagan, en el Dios que todos adoran
Al margen de la sociedad esperan que llegue su hora
Si
Si nunca has tenido prejuicios
Ni nada que agradecer
Vives tranquilo forzado en la calle
¿A quién tienes que obedecer?
Al instinto, al estómago, al sentido de desconfiar
Pero nunca a políticos ni a dioses creados por la humanidad, ¡no!
Pues claro que no, no creo en tu Dios de madera
Pues claro que no, no creo en tu Dios de madera
Pues claro que no, no creo en tu Dios de madera
Pues claro que no, no creo en tu Dios de madera
Y esta noche no pienso rezar
Que le den por culo a Dios!