Aconcagua
Gicerio Ortiz / Teodoro Fernández
¡Ay! En mi tierra cuyana todas las mañanas cuando sale el Sol
Ilumina con sus rayos sus cerros; sus valles y el manzano en flor
La blancura de sus nieves el gran aconcagua le da su fulgor
Para que sirva de manto majestuoso y noble gesta el redentor
Hermanan dos naciones Chile y Argentina con su bendición
Tiene mi bella Mendoza mil cosas hermosas que no he de olvidar
Sus ríos; sus olivares; inmensos viñedos y el verde sauzal
Pero la naturaleza y la mano del hombre todo esto le dio
Forjado en piedra y en bronce desafiando al cielo con gran esplendor
Está el cerro de la gloria y el blanco aconcagua que se acerca a Dios
Y entre las nieves y el cielo se ven los colores de mi pabellón