Manifiesto de la media verdad
Manifiesto de la media verdad
Siento que hay fronteras
que jamás voy a cruzar
y que hay maneras
de vivir innegociables.
Píldoras doradas
que no quiero tragar más,
semillas buenas
que hoy son plantas detestables.
Sé que quiero estar
en la mitad del mundo
que se juegue el cuero
por el otro medio mundo.
Sé que va a doler
con un dolor de humanidad
cuando separe
a la doctrina de mi rumbo.
La verdad de verdad
es verdad aunque la grite un mentiroso
y tiene cada mitad
atrapada por un cíclope orgulloso.
Lejos de los miedos
y los bronces y los mármoles
y de cualquier blasón
de los cuarteles.
Fiel, pero sin vendas
en los ojos,
lejos de los viejos lobos
que hoy estrenan nuevas pieles.
Ya no sé qué dice
aquel que dice hablar por mí
y no le compro
al mercader de las ideas
las espadas que trafica
bajo el manto del poder
que enfrenta al pobre
contra el pobre en esta arena.
La verdad no es verdad
si es la hija de verdades absolutas,
vuela en la oscuridad
como pájaro perdido en una gruta.